Dentro del culto Umbandista, una de las líneas de entidades más significativas y llenas de misterio son las Crianzas, también conocidas como los "Erês" en algunas corrientes. Estos espíritus, representados como niños, son mensajeros de la inocencia, la alegría y la pureza. Aunque su apariencia es infantil, su sabiduría y poder espiritual son profundos, lo que los convierte en un pilar dentro del trabajo espiritual de la Umbanda.
¿Quiénes Son las Crianzas?
Las Crianzas son entidades espirituales que se manifiestan en el terreiro con la forma y el comportamiento de niños. Son espíritus que, en su mayoría, han vivido encarnaciones cortas o que, por voluntad propia, eligen aparecer como infantes. A pesar de su apariencia y energía juguetona, son entidades con una comprensión elevada de las cuestiones espirituales.
Estas entidades se presentan llenas de dulzura, alegría y espontaneidad, pero también con una sabiduría profunda que los hace especialmente efectivos en trabajos que requieren el poder puro del amor y la fe. Las Crianzas suelen tener una conexión estrecha con los niños encarnados y a menudo se les invoca para la protección de los más pequeños.
Características de las Crianzas
Inocencia: Su energía está impregnada de pureza e inocencia. Las Crianzas no tienen malicia, y es esa energía transparente lo que les permite acceder a situaciones difíciles con la simpleza y claridad de un niño.
Alegría: Son entidades que siempre traen alegría a los trabajos espirituales. A menudo llegan con risas, juegos y cantos, creando un ambiente de ligereza y energía positiva.
Protección Infantil: Aunque parecen vulnerables, son poderosas protectoras de los niños. Se les llama para cuidar de los más pequeños en momentos de enfermedad o cuando enfrentan dificultades.
Curación: Gracias a su pureza espiritual, las Crianzas son expertas en curación espiritual, eliminando energías negativas y disolviendo cargas emocionales pesadas con su toque de dulzura.
Roles Espirituales de las Crianzas
En el ámbito espiritual de la Umbanda, las Crianzas cumplen varios roles:
1. Protección: Son invocadas para la protección de los niños y adultos, especialmente en momentos de angustia o cuando las energías negativas están afectando a una persona o familia. Su energía pura y luminosa disuelve bloqueos y protege de malas influencias.
2. Curación: Su intervención en trabajos de curación es invaluable. Las Crianzas tienen la capacidad de sanar tanto enfermedades físicas como emocionales. Utilizan elementos simples como flores, dulces o juguetes para llevar a cabo sus trabajos.
3. Intermediarios entre el Mundo Espiritual y el Humano: Las Crianzas, al igual que otras líneas de entidades en la Umbanda, actúan como intermediarios entre los planos. Sin embargo, lo hacen con una ligereza que facilita la conexión con las personas, especialmente con aquellas que tienen una energía más delicada o que se sienten cargadas emocionalmente.
4. Resolución de Conflictos: Aunque son niños en apariencia, su sabiduría les permite actuar como mediadores en conflictos. Al eliminar las complicaciones y enfocarse en lo esencial, logran ayudar a resolver problemas que, para los adultos, parecen imposibles de solucionar.
Manifestaciones y Elementos Preferidos
Cuando las Crianzas se manifiestan en el terreiro, su llegada se siente como un soplo de aire fresco. Se las reconoce por su comportamiento juguetón, su risa y su deseo de compartir dulces, caramelos y juguetes. Los mediums que incorporan Crianzas a menudo adoptan posturas y actitudes infantiles, hablando con la inocencia de un niño, pero comunicando mensajes profundos y reveladores.
En cuanto a sus preferencias:
Les encantan los dulces, como caramelos, galletas, bombones y otras golosinas, que simbolizan su conexión con la dulzura y la pureza.
Utilizan flores y juguetes como herramientas en sus trabajos espirituales, simbolizando la simplicidad y la alegría de la infancia.
Sus colores preferidos suelen ser el blanco y el rosado, que representan la inocencia y la paz.
La Importancia de las Crianzas en el Terreiro
Las Crianzas traen consigo un recordatorio valioso: el poder de la fe sencilla y el amor puro. Nos enseñan que, aunque el mundo pueda ser complicado, siempre podemos regresar a una actitud más ligera y confiada, similar a la de un niño, para enfrentar los desafíos de la vida.
En los terreiros, las Crianzas también nos muestran que la protección y la sabiduría no siempre vienen con solemnidad. A veces, la risa, el juego y la simplicidad pueden ser las herramientas más poderosas para superar obstáculos espirituales.
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En conclusión, las Crianzas en la Umbanda son entidades esenciales que, bajo su apariencia infantil, traen luz, protección, y alegría a quienes buscan su ayuda. Aunque su energía es ligera y juguetona, el poder espiritual que representan es inmenso, recordándonos que la inocencia y la pureza son una de las fuerzas más potentes del universo espiritual.
