Salve Oxalá, fuerza divina del amor, ejemplo vivo de abnegación y cariño.
Bendito sea el Señor del Bonfim.
Bendita sea la Inmaculada Concepción.
Salve Zé Pelintra, mensajero de luz, guía y protector de todos aquellos que en nombre de Jesús practican la caridad.
Danos, Zé Pelintra, el sentimiento suave que se llama misericordia. Danos el buen consejo. Danos la protección cuando puedas. Danos el apoyo, la instrucción espiritual que necesitamos para dar a nuestros enemigos el amor y la misericordia que les debemos por amor a Nuestro Señor Jesucristo, para que todos los hombres sean felices en la tierra y puedan vivir sin amarguras, sin lágrimas y sin odios.
Tómanos, Zé Pelintra, bajo tu protección; desvía de nosotros los espíritus rezagados y obsesores enviados por nuestros enemigos encarnados y desencarnados y por el poder de las tinieblas.
Ilumina nuestro espíritu, nuestra alma, nuestra inteligencia y el corazón, abrasándonos en las llamas de tu amor por nuestro Padre Oxalá.
Ayúdanos, Zé Pelintra, en esta necesidad, concediéndonos la gracia de tu ayuda junto a Nuestro Señor Jesucristo, a favor de esta petición que hacemos ahora (se hace la petición).
Y que Dios Nuestro Señor, en su infinita misericordia, te cubra de bendiciones y aumente tu luz y tu fuerza, para que más y más puedas reflejar sobre la tierra la caridad y el amor de Nuestro Señor Jesucristo.
Que a luz e a benevolência de Oxalá estejam sobre você, guiando-o com amor e carinho. Que Zé Pelintra, mensageiro de luz, proteja e ilumine seu caminho, concedendo a graça que busca. Que a paz e a harmonia estejam presentes em sua jornada espiritual.
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